El minarete es un elemento esencial de la arquitectura de las grandes mezquitas clásicas. Es desde la parte superior de esta torre que se llama a los fieles a la oración.
El minarete se eleva majestuosamente en el centro de la fachada sur, a una altura de 200 m y con una huella de 625 m².
Está equipado con un ascensor rápido con capacidad para 12 personas y que llega a la cima del edificio en menos de un minuto, con una escalera que conduce al nivel de las proyecciones. Las fachadas del minarete están decoradas con mármol colocado en forma de encaje engastado con zellige.
El minarete está rematado por un jamour de 15.5 m de alto que pesa 3 700 kg. El jamour se compone de tres bolas que miden respectivamente 3.80 m, 2.50 m y 1.60 m de diámetro. La gran bola emite un láser con un rango de 30 kilómetros dirigido hacia la Meca (la qibla).